
06 Corazón y Motivo_ La Voluntad de Dios.wav
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Proverbios 21:2
Todo camino del hombre es recto en su propia opinión; Pero Jehová pesa los corazones.
Examinemos nuestras verdaderas intenciones.
Como personas, parece que muchas veces actuamos sin pensar, y es cierto que muchas veces cuando actuamos de una determinada manera, no pensamos en todas las consecuencias que tiene esa decisión.
¿A quien no le ha ocurrido alguna vez que echando la vista atrás se da cuenta de su error pero ya es demasiado tarde?
¿Que es lo que verdaderamente nos motiva para hacer las cosas o actuar de una determinada manera?
Es una pregunta que parece sencilla pero que tiene mucha profundidad.
Muchas veces pensamos que algo está bien, o que el fin justifica nuestra manera de actuar y así dejamos de escuchar lo que Dios quiere decirnos.
El problema es, que está forma de actuar no es correcta delante de Dios, ya que Él ve nuestras verdaderas intenciones y los deseos de nuestro corazón.
Te invito a pesar: ¿Que es lo que realmente motiva mi forma de proceder y actuar?
¿Dónde está puesta mi prioridad?
Mateo 6:21 dice: "Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón"
Esto nos revela claramente que donde pongamos nuestra mirada, determinará nuestra forma de actuar.
Hoy tenemos una meta y un reto: Analizarnos y ver qué es lo que nos motiva, nos mueve y que condiciona nuestra manera de proceder y actuar.
No tratemos de justificar nuestra forma de proceder, sino tratemos de agradar a Dios y actuar correctamente.
En 1 Samuel 15:22 la Biblia dice: "Y Samuel dijo: ¿Se complace Jehová tanto en los holocaustos y víctimas, como en que se obedezca a las palabras de Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el prestar atención que la grosura de los carneros"
No vale de nada lo que hagamos, si estamos silenciando nuestra conciencia en lugar de obedecer a Dios y actuar correctamente.
Parémonos y revisemos nuestra motivación y nuestra forma de actuar. ¿Es realmente lo que Dios quiere, o es tan solo mi deseo y mi meta?
Oración: Ven delante de Dios y háblale con tus palabras. Dile que deseas actuar correctamente y pídele ayuda para hacerlo con sinceridad. Dios te bendiga. ¡Que tengas un buen día! Amén. DTA